Último día

Bueno hasta aquí llegamos con nuestro viaje; es hora de volverse. Nuestros papis nos esperan en Santiago.

Para arrancar el último día, dejamos el hotel con un buen desayuno y partimos al Tigre. Subimos a un barquito que se llamaba CATAMARÁN, y navegaba por el Delta del Tigre, en donde compartimos el viajecito con unos chicos de La Plata y una guía nos contaba sobre el Tigre. Con las chicas estuvimos en la "cubierta" disfrutando de la vista y el vientito. Algunos bajaron a visitar una de las casas de Sarmiento, y después seguimos. Eso fue el Catamarán.

Nos esperaban en La Cervecería Barbarroja con unas milanecitas con papas para el almuerzo. Pasamos a Temaiken, nos hicieron una foto grupal y realizamos una visita rapidita viendo un par de animales. Cuando terminamos nos felicitaron porque nos comportamos de diez, y los chicos aprovecharon para comprarle a sus novias algún regalito.

Volvimos a la cervecería con menos ganas que antes, para conocer un poco del proceso productivo de la cerveza y aprendimos que es muy buena y nutritiva para la salud. La anécdota de la tarde: A Giuli la agarró un poco susceptible un árbol del complejo y le tiró un cacho de sabia. De Barbarroja pegamos la vuelta, nos subimos al bondi y clavamos unas 15 horitas de viaje. "La noche está en pañales", frase célebre de la noche. Entre una que otra jodita (pobre Yocca), llegamos al pago, viendo las caras de nuestros papis contentos porque regresábamos.